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Continuaba todo 2-1 cuando Tapia introdujo en el campo a dos hombres, Alberto Luque y Salvador Ballesta. |
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Quizás parece raro escribir esta crónica un jueves, pero es así, estamos en la jornada 32º y corresponde a la típica jornada que todas las temporadas se juega entre semana, esa jornada que nos alegra la semana, porque entre un partido del domingo y el siguiente podemos disfrutar de otro encuentro entre medias.
Osasuna-Málaga CF., un partido duro se nos presentaba. Había que ganar si queríamos mantener aspiraciones de ir a Europa la próxima temporada y así fue, se ganó. El partido televisado por la Sexta, en esta ocasión, no pude presenciarlo con los demás malaguistas que seguimos domingo tras domingo los partidos en la Peña Bokerones en Madrid. Tuve que seguirlo desde casa.
Al partido íbamos muy tocados en defensa. Weligton y Calleja, titulares en lo que va de temporada, no podían jugar, así que Tapia puso a Cuadrado y Nacho para suplir a ambos.
El encuentro comenzó poniéndose de cara para el Málaga en un estadio que por el ambiente es bastante hostil. Apoño transformó el penalti que minutos antes le hicieron a él mismo, nos poníamos por delante, parecía un partido sencillo, pero en liga, a estas alturas que nos encontramos y jugándose cada conjunto lo que se juega, no hay nada fácil. Tras el gol de Apoño, el Málaga parece que se relajó o le entró el relax propio de una tarde primaveral como la que se vivía en el Reyno de Navarra ayer miércoles, y el Osasuna consiguió darle la vuelta al marcador.
La primera mitad concluyó con la ventaja para el equipo local de 2-1. La segunda parte sería todo un recital de fútbol del Málaga y un recital de tarjetas por parte del colegiado, que expulsó a tres jugadores del Osasuna y a uno del Málaga.
Continuaba todo 2-1 cuando Tapia introdujo en el campo a dos hombres, Alberto Luque y Salvador Ballesta. De la cabeza de este último saldría el cabezazo que envió a la red de la meta navarra el tercer gol del Málaga.
Se sufrió, pero se consiguieron traer los tres puntos hacia Málaga. Y aún casi sin tiempo para recuperarnos de este partido, estamos a las puertas de otro, el MÁLAGA – DEPORTIVO DE LA CORUÑA, quizás el más importante de la temporada si queremos optar a plazas europeas para la próxima temporada. El sábado la Rosaleda debe de ser una fiesta, animando y apoyando al equipo en estos últimos partidos que nos quedan, disfrutando con el equipo que ayer miércoles consiguió la victoria número 100 del Málaga CF. en Primera División.
